Para cualquier empresa o institución es primordial que se lleven a cabo Auditorias de Información, de esta manera se llegará a una indicada gestión de los recursos informativos aptos para un mejor desarrollo de los procesos dentro de estas.
El autor hace referencia a dos tipos de auditoria, la de la información que en esta lo que se va a auditar principalmente en el material tangible lo que se puede ver y tocar, este tipo de material es el que va a dar a las personas que laboran en la institución los mecanismos para alcanzar las metas y objetivos propuestos, serán la guía para cumplir con lo establecido, entre ellos se pueden mencionar las políticas de la institución, reglamentos de los departamentos etc.
Por otra parte esta la auditoria del conocimiento, en este caso lo que se audita es precisamente el conocimiento que poseen los trabajadores de las organizaciones, o como menciona el autor la “información tácita” la cual se encuentra ligada con el capital intelectual de la persona, es todo lo que estos han adquirido en sus trabajos con el paso del tiempo y que no se encuentran expresados en ningún tipo de material, es conocimiento al que no se puede acceder pero que de igual forma es indispensable para el crecimiento de la empresa.
Hoy en día se habla de la gestión de información o del conocimiento como es también llamada y las nuevas tecnologías de la información llevan a las empresas a preocuparse por el desarrollo e implementación de auditorias a toda la información que se encuentre de forma digital.
El inventario constituye una herramienta para que la información que se encuentra en las empresas pueda ser auditada de una mejor forma y contribuirá a que exista un mayor flujo de los recursos de información, ya que favorece a determinar que es lo que se encuentra disponible.
Para que esta información se encuentre al servicio tanto de los trabajadores como para los usuarios se plantea la posibilidad de la creación de bases de datos de inventarios, esto favorecerá a un mejor control de lo contenido en esta.
